Renovación de la fuente de Las Nereidas
La fuente de las Nereidas es una de las obras de arte más importantes que posee la Ciudad. Esculpida por la célebre Lola Mora, produjo revuelo a principios del siglo pasado por sus desnudos. Tanto que de su original ubicación en Plaza de Mayo fue desterrada a la Costanera Sur, sitio cuasi inhóspito del Buenos Aires del 1900.
La zona, con el pasar de los años, creció y Las Nereidas se convirtió en un ícono porteño. Para mantenerlo vigente se realizó una importante restauración que puso en valor la fuente y agregó una imponente iluminación LED.
Además, se cambió toda la instalación eléctrica, se impermeabilizó el interior y se restauró el mármol de carrara original. Así Las Nereidas continúa con su aporte artístico a uno de los paseos más visitados de Buenos Aires.
Las Nereidas es una de las obras más relevantes de la escultora Lola Mora (1867-1936), quien la realizó por encargo del intendente de la ciudad de Buenos Aires, Adolfo J. Bullrich. La escultora, que se hallaba en un largo viaje de estudios en Roma, en agosto de 1900 regresó a su país con los bocetos de lo que sería la fuente, ofrecida en donación a la Municipalidad de Buenos Aires.
La fuente la realizó en Roma junto a talleristas profesionales y alumnos del taller. Primero armó un pequeño modelo en arcilla y luego construyó uno en su actual tamaño en yeso. Finalmente se realizaron los trozos de mármol, que fueron trasladados a Buenos Aires a mediados de 1902. Lola también viajó para supervisar el armado final. Para ello usaba pantalones que le facilitaban el movimiento sobre los andamios, lo que fue considerado por algunos como un agravio a la moral, por lo que hubo que rodear el lugar de trabajo con una cerca de maderas.