Aumento del número de peatones atropellados en Buenos Aires
En 2018, aumentó un 35,4% el número de peatones muertos en siniestros viales en la ciudad de Buenos Aires respecto del año anterior. La cifra llegó a los 65 fallecidos, mientras que en 2017 sumaron 48. Los peatones representan el 44,21% del total de víctimas en estas circunstancias. El grupo con mayor participación (19%) son los mayores de 75 años, cuando las víctimas más frecuentes de accidentes de tránsito suelen tener entre 25 y 35. El motivo: frente a una amenaza o un error tienen menos capacidad de reacción, al mismo tiempo que su organismo es más vulnerable ante un impacto.
«Son números menores que 100, o sea que son bajos. La variación interanual se puede disparar de un año a otro sin que podamos encontrar una explicación. Desde 2015 el número de peatones muertos venía en baja. Por eso, lo que hay que mirar son las tendencias tomando varios años. Una posible causa es que en 2018 no tuvimos casos ignorados, es decir, aquellos que la policía no especifica si el fallecido fue un peatón, un motociclista o un ciclista. Por eso, tal vez, se sumaron más peatones», dijo Adriana Jakovcevic, gerenta operativa del Observatorio de Tránsito de la ciudad de Buenos Aires.
Gran parte de los peatones mueren en un siniestro que involucra a vehículos de gran porte, entre ellos, los colectivos. «Muchos siniestros tienen que ver con el punto ciego de los colectivos. Hay un fenómeno que se llama ‘barrido lateral’, en donde las ruedas de atrás giran más cerrado que las delanteras. Muchos esperan abajo del cordón y no tienen en cuenta esta cuestión», explicó Jakovcevic.
En 2018, hubo 28 fallecidos en accidentes entre un peatón y un transporte de pasajeros. Esta combinación está al tope de la lista (19,86%). La siguen los siniestros entre motos y transportes de cargas, con 19 víctimas (13,48%).
Los momentos del día en los que hay más accidentes están directamente relacionados con el aumento del flujo peatonal, por ejemplo, a última hora de la tarde cuando la gente sale del trabajo.
En cuanto a la responsabilidad en los accidentes, desde la Ciudad afirman que, por lo general, es compartida: “En el 40% de los siniestros con peatones, ambas partes cometieron una falta. Cuando analizamos cuáles son los factores conductuales de los peatones, los errores más frecuentes tienen que ver con cruzar por un lugar indebido o que no respetan el semáforo. Esto se conjuga con un auto que cruza en rojo o en transición, o también puede ser que el auto venía muy rápido y no llegó a frenar”, asegura Jakovcevic.
El resto de las víctimas del tránsito (ciclistas, motociclistas y automovilistas) mostraron una tendencia en baja. Entre 2017 y 2018, el número de ocupantes de automóviles fallecidos bajó de 25 a 19; el de ciclistas, de cinco a tres, y el de motociclistas se mantuvo en 56. Del total, el 63% de los fallecidos son varones y el 37%, mujeres.
Alberto Silveira, presidente de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, entiende que la prioridad que tiene el peatón es algo ignorado no solo en la ciudad, sino en todo el país por los argentinos y que se trata de una cuestión cultural que «habrá que afrontar».
«Hicimos mediciones y apenas el 10% de los conductores le otorgan la prioridad al peatón. En el país casi no se labran actas por infringir la prioridad al peatón, eso no ayuda. Es verdad que en muchos casos hay responsabilidad compartida o exclusiva del peatón, pero hay que tener en cuenta que el conductor de un vehículo es el que maneja el elemento más peligroso y debe tener más precaución», opinó Silveira.
«Creo que a todos nos falta un poco de paciencia», dijo Silvia Irigaray, presidenta y una de las fundadoras de la Asociación Civil Madres del Dolor. Recuerda una historia violenta que vivió hace algunos días: «Iba en un taxi y un chico cruzó la calle mandando un mensaje desde su celular. El taxista bajó la ventanilla y le gritó que le iba a meter un tiro en la nuca, así no iba a cruzar distraído nunca más. Fue tremendo. Esta historia ilustra que ambas partes hacen las cosas mal. También veo madres que cruzan por la mitad de la calle con bebés en el cochecito. Todos necesitamos más tranquilidad, y debemos asumir y corregir nuestros errores».