Las calles del Barrio Mugica tendrán nombres de flora, fauna y música popular
La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires aprobó la ley que formaliza y da nombre a las calles y espacios públicos del Barrio Mugica. Se trata de un paso fundamental para la urbanización e integración de sus habitantes ya que, mientras muchos dan por sentado que tener una dirección es una obviedad, esto consiste en una deuda que aún permanece en los barrios populares del país.
Tener una dirección formal representa un hito para que los vecinos y vecinas del Barrio Mugica puedan tener las mismas oportunidades y responsabilidades que cualquier ciudadano. Facilita la búsqueda laboral evitando la discriminación, mejora el acceso de los servicios y del correo, y evita las confusiones a la hora de identificar domicilios que hasta hoy contaban con números de casa y de manzana, muchas veces repetidos.
La elección de los nombres comenzó en 2018, en un proceso que se dividió en 5 etapas y en el que votaron más de 4.700 vecinas y vecinos del Barrio Mugica. Para lograrlo, se trabajó desde la Secretaría de Integración Social y Urbana en conjunto con la Dirección General de Patrimonio, Museo y Casco Histórico, dependiente del Ministerio de Cultura, la Dirección General de Participación Ciudadana y la Legislatura porteña.
En primer lugar se presentaron y acordaron las categorías para la denominación de las calles y espacios públicos. En segunda instancia se seleccionaron las categorías definitivas: se ubicaron buzones en espacios y edificios públicos, espacios comerciales y escuelas para que los vecinos y vecinas pudieran votar sobre las 14 acordadas. Las categorías que resultaron ganadoras fueron: Reservas Naturales de América Latina, Fauna de América Latina y Danzas, Bailes, Ritmos de América Latina.
La tercera etapa fue la proposición de nombres, de acuerdo a las categorías más votadas, entre los que figuran Colibrí, Palo Santo y Cumbia, por mencionar sólo algunos. Para ello nuevamente se dispusieron buzones en todo el barrio. Además, los vecinos propusieron otros nombres por fuera de las categorías seleccionadas, que fueron sumadas. Un total de 1.191 vecinas y vecinos participaron de esta etapa y se recibieron 1.488 propuestas.
Ahora el Cerro de los 7 Colores y Machu Picchu están más cerca de los porteños, y la Cumbia, el Bolero y el Folklore suenan fuerte en un mismo lugar.
Algunos nombres de calles: Mbaracayú – Talampaya – Isla de Pascua – Cerro de los 7 Colores – Calilegua – Futaleufú – Islas Galápagos – Machu Picchu – Guacamayo – Yaguareté – Puma – Quetzal – Huemul – Vicuña – Alpaca – Ciervo de las Pampas – Aguará Guazú – Flor de Otoño – Colibrí – Guayaba – Cedrón – Guatambú – Jazmín del Paraguay – Ruda – Palo Santo – Alerce – Ciprés – Lapacho Rosado – Orquídeas – Mapuches – Calchaquíes – Tehuelche – Purmamarca – Iruya
Otros nombres de espacios públicos: Bolero – Mambo – Cumbia – Caporales – Ranchera – Rumba – Cueca – Zamba – Pericón – Folklore
El Conjunto Urbano Barrio Padre Mugica es una villa de emergencia repartida entre la Comuna 1 (donde se ubica todo el barrio Retiro) y la Comuna 2 (donde se ubica el barrio Recoleta). El asentamiento surgió en 1932 con el nombre de «Villa Desocupación» durante los tiempos de la década infame y a partir de allí se sucedieron diversos intentos de erradicación por parte de las autoridades, aunque éstos nunca lograron eliminarla por completo.
Se encuentra junto al principal centro de trasbordo de pasajeros de la Capital. Entre 1993 y 1995 se construye la Autopista Illia que implica el desalojo de varias manzanas. Luego, comienza a crecer lo que se llamará la Villa 31 bis, localizada entre la autopista y el ferrocarril. El terreno ubicado debajo de la autopista comienza a ser poblado y las construcciones crecen en altura hasta alcanzar la autopista. Gran parte de la población que se localiza en dicho territorio proviene de la migración de países limítrofes. Este proceso de inmigración se da en el contexto de la conformación de Buenos Aires como una ciudad globalizada.