En 2024 empezarán a construir el viaducto del tren Sarmiento
El año que viene no habrá nuevos impuestos para los porteños y los que existen se actualizarán con el índice de precios, excepto las patentes, que tendrán un tope por inflación para evitar que la suba de los precios de los autos impacte desmedidamente en ese impuesto. Se comenzará a construir la tan anunciada como demorada transformación del ferrocarril Sarmiento, que finalmente no será un soterramiento, sino un viaducto en un tramo. Esta y otras obras públicas representarán el 15% del total del gasto de la Ciudad, que también se destinará a tareas y puesta en valor de los hospitales públicos, la modernización y ampliación de la red de subterráneos, la compra de computadoras y otros equipos para el Plan Sarmiento. Además, está prevista la puesta en valor del nuevo Parque de Innovación, en Núñez, y la restauración de los edificios del Ecoparque.
Así surge del proyecto que el gobierno porteño acaba de enviar a la Legislatura local, que detalla el presupuesto de gastos e ingresos para 2024 y no ofrece grandes sorpresas, aunque sí permite ver cuáles serán las claves de la gestión entrante, a cargo de Jorge Macri, que sucederá a Horacio Rodríguez Larreta al frente de la ciudad de Buenos Aires. Según detallaron voceros del Ministerio de Hacienda y Finanzas, ambos equipos consensuaron el texto remitido a los diputados, si bien durante el año próximo podrá haber modificaciones.
La gran novedad es el inicio de las obras del viaducto del Sarmiento, que tendrá una funcionalidad similar a los otros del Mitre y también busca eliminar barreras para favorecer la fluidez del tránsito y terminar con los actuales problemas de circulación que generan.
¿En altura o en trinchera? Ese fue durante la campaña electoral el debate entre los dos precandidatos de Juntos por el Cambio para solucionar el drama de esa línea ferroviaria. Durante la campaña, Martín Lousteau proponía construir una trinchera a siete metros de profundidad –similar a la ya existente entre Balvanera y Caballito– y de unos nueve kilómetros de extensión, con la posibilidad de generar un “subte a cielo abierto” en un tramo del recorrido. Finalmente, esa idea quedó desechada tras la derrota del candidato radical.
Al proclamarse Macri como nuevo jefe de gobierno porteño, se presuponía que avanzaría su idea, basada en un plan anterior de Rodríguez Larreta: elevar las vías entre el puente Fragata Sarmiento (Yerbal al 1300), en Caballito, y la autopista Perito Moreno, en Villa Luro, donde iniciará una pendiente para pasar por debajo de la autopista y continuar por la superficie hasta salir después de la General Paz. Desde la Perito Moreno se prevé la construcción de pasos bajo a nivel en los cruces más conflictivos, principalmente en Liniers.
El envío del proyecto del presupuesto, que incluye estas obras y les destina un presupuesto de 36.237 millones de pesos para el inicio de obras, es la primera noticia de que el viaducto del Sarmiento empezará a concretarse el año próximo.
El proyecto del presupuesto 2024, además, recuerda que ya entrará en vigencia la eliminación del impuesto a los sellos de las tarjetas de crédito. La prioridad del plan de gastos de la Ciudad, según surge del texto, será la educación, con el 20,2% del total de las partidas por invertir. Las áreas sociales –que, además de educación, incluyen salud y promoción social– significarán el 64% del total.
Ahora, los legisladores deberán votar la iniciativa, que realizó las estimaciones sobre la base de un cálculo de una inflación del 69,5% y un dólar oficial a $607 para fines del año próximo. La presentación a la prensa redactada por el Ministerio de Hacienda y Finanzas porteño reitera en varios tramos que las proyecciones se hacen pese al “incumplimiento” por parte del gobierno nacional del pago de la coparticipación, tal como ordenó la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Esto significa que la Ciudad dejó de percibir unos 271.000 millones de pesos, “lo que afecta considerablemente la previsión de recursos para el año próximo. En este sentido, para 2024 esta pérdida de recursos se proyecta en 625.000 millones de pesos”, dice el informe. De todas formas, en relación a otras fuentes de ingresos, se lee que el dinero de la coparticipación federal representaría el 10,3% del total anual, mientras que el cobro de ingresos brutos representa el 76%.
El presupuesto total proyectado asciende a 5.481.261,1 millones de pesos para el año próximo. El texto destaca que, por tercer año consecutivo, de delinea un ejercicio con déficit cero, sin aumento de impuestos ni creación de nuevos tributos. “Con respecto a las proyecciones para el próximo año, se estima un total de gastos por $5.776.122 millones y un total de recursos por $5.800.018 millones. De esta manera, producto de las acciones e iniciativas desarrolladas durante los últimos años, para 2024 se prevé un resultado financiero superavitario (déficit cero) estimado en $23.896,4 millones”, señala el documento.
El servicio de seguridad seguirá también siendo una prioridad, se detalla en el proyecto: para el área se destinará el 15,4% del total del presupuesto. Se contempla para el año próximo la compra de equipamiento policial, como chalecos, equipos de comunicación y cámaras, por unos 79.888 millones de pesos y la compra de nuevos patrulleros y mantenimiento de la flota por 10.972 millones de pesos.