Finalizó la restauración de la Fachada de Casa Calise
Ubicada en Balvanera, en la calle Hipólito Yrigoyen al 2500, la Casa Calise, ese edificio de 1911 que es joya del Art Nouveau porteño, realizado por el arquitecto italiano Virginio Colombo, inauguró su fachada totalmente renovada.
Para este trabajo distintas empresas aportaron los más de 4 millones de inversión. La Casa Calise, cuenta con unas 35 esculturas, de Ercole Pasina.
La fachada de la Casa Calise, ubicada en Once, volvió a ser una fiesta de arte, completa. La Ciudad de Buenos Aires recuperó uno de sus símbolos de modernismo más lindo y menos conocido. Es que tras cinco meses de trabajos, terminaron la restauración del frente del edificio. La Asociación Art Nouveau Buenos Aires (AANBA) fue la impulsora de la puesta en valor. En su fachada se divisan 13 representaciones femeninas; 10 de querubines, y 12 cabezas, también de mujeres, entre otras, se trata de uno de los edificios que más esculturas muestra en toda la ciudad.
La recuperación fue realizada por la arquitecta Elina Tassara, Ricardo Fuentes y Christian Le Monnier. Tres empresas aportaron $ 4,1 millones, en el marco de la Ley de Mecenazgo entre los trabajos arreglaron las estatuas, hechas por Ercole Pasina, les sumaron piezas perdidas, las limpiaron e iluminaron con LEDs.
“La restauración incluye vitrales y más esculturas que están adentro y se prevé completar en dos meses”, agregó Willy Pastrana, presidente de AANBA. Él y Tuma contaron que en la Calise funcionan viviendas y una pensión. Y que en la planta baja quieren reabrir locales. “El dinero no alcanzará para arreglar todo. Se necesitará una segunda etapa”, dijo Pastrana. Y Tuma adelantó que tienen un plan que incluiría un museo.
La Calise fue diseñada por el arquitecto italiano Virginio Colombo (1885-1927), celebrity del Art Nouveau. Se calcula que en poco más de 20 años, Colombo -autor también de la Casa de los Pavos Reales, en el mismo barrio, y de la ex sede de la Societá Unione Operai Italiani, maravilla en ruinas en San Nicolás- construyó unas 50 casas en la Ciudad.
Con motivos inspirados en la naturaleza y sensualidad, el Art Nouveau en Francia o Liberty en Italia se extendió por el territorio porteño -siempre combinado con otras influencias- en la década de 1910. Lo hizo de la mano la burguesía y por barrios entonces pujantes, cerca del Centro, donde había espacio para edificar.
De afuera, la Calise parece un palacio. Ocupa unos 8.000 m2. Pero la familia Calise, dueña de viñedos en Mendoza -de ahí su nombre y de ahí las uvas que decoran la fachada- se la encargó a Colombo para alquilar, sin dejar de encantar. Quien pase a verla, por Hipólito Yrigoyen 2562/78, seguro, no se perderá la imponente estatua que muestra a la pareja, en la que algunos vieron, en vez de pasión, una crucifixión. Y no debería perderse los “amorcitos”, desde alegres hasta extenuados. ¿Vencidos, tal vez, por tomar demasiadas copas del viñedo familiar? Tampoco, el espiral de la puerta: evoca a un molusco, el Nautilus, al que Colombo usó tanto que expertos consideran otra de sus formas de firmar.