La Escuela Media Nº 2 conserva el patrimonio arquitectónico del ex natatorio de Parque Avellaneda
La Escuela Media Nº 2 distrito escolar 13 funciona en el edificio del antiguo natatorio de Parque Avellaneda. El mismo fue inaugurado en 1925 como la primera casa de baños de la Ciudad de Buenos Aires pero desde 1970 no recibió más bañistas y en el 2000 se iniciaron las gestiones para destinarlo para escuela.
Este inmueble de estilo art noveau de líneas simples, ornamentación elegante y austera permitió ser refuncionalizado conservando aún la memoria de su uso original. En su interior es posible apreciar el espacio donde existió la antigua piscina y en el subsuelo sobreviven las antiguas instalaciones del sistema de calderas del natatorio como testimonio del modo constructivo con que se desarrolló el edificio. En el acceso se pueden observar las boleterías originales así como los revestimientos laterales de la pileta y la ornamentación en su patio interior rodeado de columnas grecorromanas.
El estilo está ligado al lenguaje de la corriente artística modernista «secesión vienesa» reconocible en las barandas de la escalera y en las líneas de la ornamentación de las puertas principales. Este movimiento predominó en la arquitectura de la Ciudad proyectada y construida entre 1920 y 1940.
Junto con la Casona de los Olivera y el Tambo, el natatorio completa el trío histórico del Parque Avellaneda. Es por eso que a estas tres construcciones las precede el adjetivo «antiguo»: la antigua casona, el antiguo tambo y el antiguo natatorio, que dan testimonio de la historia del Parque.
La Escuela Media Nº 2 distrito escolar 13 que tiene como sede el edificio del antiguo natatorio en Lacarra y Av. Directorio en el Parque Avellaneda, fue inaugurada el 7 de marzo de 2007 y es la única secundaria de la Ciudad que ofrece orientación en agro y ambiente con certificación jurisdiccional en construcción y mantenimiento de espacios verdes.
Huellas de la Escuela valoriza el patrimonio arquitectónico de las escuelas porque los edificios albergan en sus paredes, pasillos, aulas, salones y bibliotecas las huellas de la historia y la identidad de cada comunidad educativa y proyectan su imagen en la Ciudad.